Golpe fulminante al huachicol en Perote: una “empresa fantasma” escondía 250 mil litros de combustible robado

Ocho detenidos, 12 pipas aseguradas y más de 247 millones de pesos en pérdidas para el crimen organizado

Perote, Ver., a 1 de noviembre de 2025.- Lo que parecía una empresa legítima de manejo de residuos peligrosos resultó ser el epicentro de una operación criminal dedicada al robo y almacenamiento de combustible. En un operativo sorpresa, fuerzas federales irrumpieron en las instalaciones y descubrieron 250 mil litros de hidrocarburo ilegal, así como 12 pipas, equipo especializado y documentos comprometedores.

La acción, encabezada por la Secretaría de Marina (Semar) y apoyada por la FGR, la SSPC, la Sedena, la Guardia Nacional y Pemex, culminó con la detención de ocho presuntos responsables, quienes fueron puestos a disposición del Ministerio Público Federal. Las autoridades estiman que el decomiso representa una afectación económica superior a los 247 millones de pesos a grupos delictivos vinculados con el llamado huachicol.

Durante la inspección, los agentes descubrieron que el inmueble operaba con una fachada empresarial para ocultar su verdadera función: almacenar, procesar y distribuir combustible robado. El sitio contaba con sistemas de bombeo, mangueras industriales y un sofisticado control de ingreso, diseñado para simular legalidad ante las autoridades.

El hallazgo enciende nuevamente las alarmas sobre la presencia del crimen organizado en el corredor central de Veracruz, donde la red de ductos de Pemex ha sido perforada decenas de veces en los últimos años. Municipios como Córdoba, Tierra Blanca, Coatzacoalcos y Perote se han convertido en puntos estratégicos para las mafias del combustible.

“Este golpe representa un mensaje claro: no habrá espacio para la impunidad. Vamos tras quienes lucran con el patrimonio nacional y ponen en riesgo a las comunidades”, advirtieron fuentes federales.

El operativo fue resultado de labores de inteligencia que revelaron movimientos irregulares de pipas durante la madrugada, lo que llevó a la intervención inmediata de las autoridades. Dentro del inmueble también se aseguraron dispositivos electrónicos y documentación que podría revelar los nexos de esta red con otros estados del país.

El Gobierno Federal reiteró que la guerra contra el huachicol no se detiene, y que los operativos interinstitucionales seguirán fortaleciendo la vigilancia en zonas de alto riesgo.

Con este golpe, Veracruz vuelve a ser escenario de una batalla silenciosa pero firme: la lucha por recuperar el control del combustible y devolverle la seguridad a las familias que por años han vivido a la sombra del delito.

Una “empresa” que fingía reciclar residuos peligrosos terminó siendo exhibida como el rostro oculto de una de las economías ilícitas más rentables del país —una que hoy, al menos en Perote, ha quedado sin combustible.