Migración y crisis económica alcanzan al comercio local: caen ventas por Día del Padre en Misantla
Misantla, Ver., a 17 de junio del 2025.- La crisis migratoria que enfrentan miles de veracruzanos en Estados Unidos ya comienza a reflejarse de forma contundente en el bolsillo de los comerciantes locales. Así lo denunció en entrevista para este noticiero Daniel Francisco Marcos, locatario del mercado municipal "Antonio M. Quirasco", quien lamentó la drástica caída en ventas durante el reciente Día del Padre, una fecha que años atrás significaba bonanza.
“El flujo económico ya no es el mismo que hace algunos años. Antes en estas fechas festivas se recibía dinero del extranjero, lo que generaba movilidad económica: compras, comidas familiares, regalos. Hoy la gente ya no gasta igual y eso nos impacta a los comerciantes”, afirmó con preocupación don Dani, quien lleva más de dos décadas trabajando detrás del mostrador.
El comerciante explicó que el envío de remesas se ha desplomado, debido a la creciente persecución contra migrantes en Estados Unidos, la pérdida de empleos y los impuestos que encarecen las transferencias.
“Muchos migrantes están escondidos, sin trabajar, con miedo a ser deportados. El poco dinero que ganan lo usan para sobrevivir allá y ya no pueden mandar para acá. Eso afecta a las familias, al comercio y a todo el país”, sentenció.
De acuerdo con testimonios recogidos en el mercado municipal, cada vez son menos las familias que reciben apoyo económico del exterior, lo cual ha frenado drásticamente las compras. Festividades que antes eran sinónimo de mesas llenas y regalos, hoy pasan casi desapercibidas.
Aunque se esperaba un respiro en las ventas por el Día del Padre, el resultado fue desalentador. Los comerciantes coinciden en que el movimiento fue muy inferior al que se observa en otras celebraciones como el Día de las Madres o fiestas patronales, donde la tradición y la emotividad aún impulsan la economía.
“Vendimos un poco más que en un día normal, pero nada que ver con lo que era antes. Ya ni en estas fechas especiales hay consumo fuerte”, agregó Daniel Marcos.
Frente a esta realidad, los locatarios exigen mayor apoyo a la economía local y programas que alivien el impacto que deja la crisis migratoria, misma que se siente con fuerza en regiones como Misantla, donde muchas familias dependen del dinero que envían sus seres queridos desde el norte.
“El comercio es el termómetro de cómo está la gente. Si no venden los mercados, es porque el pueblo ya no tiene qué gastar”, concluyó don Dani con una mirada que mezcla nostalgia y resignación.
La situación exige atención urgente, pues lo que hoy se resiente como una baja en ventas, mañana podría convertirse en el cierre definitivo de decenas de negocios familiares.
No hay comentarios