Aumentan casos de hospitalización por acoso escolar y cibernético en menores de edad: HSMT alerta sobre impacto en salud mental

Baja California, a 4 de junio del 2025.- Las infancias y adolescencias están enfrentando una crisis silenciosa: el acoso escolar y el hostigamiento en redes sociales se han convertido en las principales causas de afectación emocional que derivan en internamientos psiquiátricos. Así lo advirtió Ericka Zamora, psicóloga del área de hospitalización de infancias y adolescentes del Hospital de Salud Mental de Tijuana (HSMT).

Zamora reveló que muchos de los menores que llegan al hospital presentan intentos suicidas, y tras recibir atención clínica, se identifica que han sido víctimas de bullying tanto en sus escuelas como en plataformas digitales.

"Son agredidos verbalmente, se burlan de ellos constantemente, y eso detona un desequilibrio emocional que se manifiesta en ansiedad, frustración e irritabilidad", explicó la especialista.

La psicóloga enfatizó que uno de los factores que agravan la situación es que muchos niños, niñas y adolescentes no tienen las herramientas emocionales ni la confianza para hablar con sus padres o adultos cercanos sobre la violencia que enfrentan.

Ante esta falta de comunicación y apoyo temprano, los casos suelen escalar hasta necesitar intervención clínica urgente, lo que podría evitarse con atención oportuna y entornos más seguros.

Actualmente, el pabellón infantil y juvenil del HSMT atiende a 27 pacientes menores de edad, de los cuales 18 son mujeres y nueve son hombres. Este número refleja un aumento preocupante, ya que la semana pasada eran 22 los hospitalizados.

“Las razones por las que están internados son gestos o ideas suicidas, trastornos de ansiedad, depresión, inestabilidad emocional y un incremento en el diagnóstico de déficit de atención. Estamos cerrando el ciclo escolar, y esto ha detonado una mayor demanda de atención”, detalló Zamora.

La especialista hizo un llamado urgente a madres, padres y docentes para escuchar activamente a los menores, estar atentos a cambios en su comportamiento y fomentar canales de comunicación emocional.

"Muchos menores están pidiendo ayuda a gritos, pero lo hacen en silencio", advirtió.

En un entorno cada vez más digitalizado y exigente, la salud mental de niñas, niños y adolescentes no puede seguir siendo ignorada. La detección temprana y el acompañamiento afectivo son claves para prevenir tragedias y construir espacios seguros donde puedan crecer sin miedo.