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Othón Hernández Candanedo cierra un ciclo en el Congreso de Veracruz y promete seguir trabajando por la justicia social.

Por Arquímedes González
Xalapa, Ver., a 31 de octubre del 2024.- En una emotiva última sesión en el Congreso del Estado de Veracruz, el diputado Othón Hernández Candanedo se despidió de sus colegas legisladores y de los ciudadanos a los que representó en los últimos años. Con palabras llenas de gratitud y compromiso, el representante recordó su misión de llevar la voz del pueblo veracruzano a la máxima tribuna del estado, expresando el orgullo y la responsabilidad de haber trabajado por el bien común y la justicia social.

“Quiero agradecer a todos ustedes por la confianza depositada en un servidor para representarlos y ser su voz en la máxima tribuna que tenemos los veracruzanos”, expresó Hernández Candanedo, conmovido al recordar los innumerables encuentros con ciudadanos en sus hogares, empleos, y en las calles. “Siempre puse al frente lo que ustedes me compartieron, lo que me dijeron en cada conversación, cada encuentro, cada mensaje; esa confianza es lo que me impulsó y seguirá impulsándome”, añadió.

La tarea legislativa, enfatizó, no es solo debatir o aprobar leyes, sino llevar a la práctica un trabajo de campo que permita que esas leyes realmente impacten la vida diaria de los veracruzanos. Desde el inicio de su gestión, su objetivo fue claro: ser un puente entre los problemas cotidianos de la población y las soluciones que el poder legislativo puede ofrecer.

En sus declaraciones, Hernández Candanedo subrayó su compromiso con la justicia social, afirmando que la búsqueda del bien común ha sido y será el motor que guíe su carrera. “El deber cumplido me impulsa a continuar trabajando, ofreciendo a ustedes toda mi capacidad para lograr alcanzar los objetivos que como sociedad necesitamos y abrir un ciclo más en la búsqueda del bien común y la justicia social”, aseguró el diputado.

Sus palabras reflejan una firme convicción de que la política debe centrarse en servir a las personas, en atender las necesidades de aquellos que más lo necesitan y en luchar por un Veracruz más equitativo. Durante su mandato, promovió iniciativas en temas clave como el desarrollo económico, la seguridad, y la educación, y mostró especial sensibilidad hacia las comunidades rurales y las zonas marginadas del estado.

El paso de Hernández Candanedo por el Congreso no estuvo exento de desafíos. En un contexto político complejo y con una sociedad cada vez más exigente, el diputado enfrentó cuestionamientos y presiones propias de la labor legislativa. Sin embargo, quienes lo conocen destacan su perseverancia y su capacidad para escuchar, cualidades que, según él, le permitieron acercarse a la ciudadanía y entender mejor las problemáticas de los veracruzanos.

Entre sus logros, Hernández Candanedo impulsó reformas en apoyo a los trabajadores del campo, sector que conoce de cerca y que, a su juicio, necesita una protección más sólida frente a los cambios en la economía nacional e internacional. Además, promovió medidas de seguridad y apoyó iniciativas para fortalecer la educación pública, temas que considera prioritarios para mejorar la calidad de vida de la población.

“Estas experiencias me han permitido comprender la responsabilidad de ser su voz, de escuchar sus problemas, y de no quedarme solo en las promesas. Mi compromiso es que cada palabra que recibí se transformara en acciones”, comentó.

A pesar de que su ciclo en el Congreso de Veracruz llega a su fin, Hernández Candanedo dejó claro que su vocación de servicio continúa. En su discurso de cierre, lanzó un mensaje a los veracruzanos que lo han acompañado y apoyado: “¡Sigamos trabajando, cuenten con un servidor porque esto no ha terminado!”.

Esta promesa de continuidad en su labor pública es un llamado a no bajar la guardia, a seguir enfrentando los desafíos que enfrenta Veracruz y a no perder de vista los ideales de justicia e igualdad que marcaron su gestión. Hernández Candanedo se comprometió a mantenerse activo, ya sea en la política o en otros ámbitos de servicio, con el mismo enfoque de cercanía y trabajo constante que ha caracterizado su vida pública.

Así, Othón Hernández Candanedo cierra un ciclo en el Congreso de Veracruz, pero con la promesa de seguir trabajando en beneficio de la comunidad. Su despedida es, en realidad, el inicio de una nueva etapa en su carrera, en la que asegura que continuará luchando por un Veracruz más justo y equitativo. Con su característico estilo cercano y transparente, el diputado deja en claro que seguirá siendo un aliado y una voz para quienes lo necesiten, demostrando que el verdadero compromiso con el pueblo veracruzano no termina con un periodo legislativo, sino que se convierte en un legado.

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