La Importancia de Denunciar el Acoso y Abuso Sexual a Menores en Misantla

Por Arquímedes González.

Misantla, a 28 de septiembre del 2024.-El acoso y el abuso sexual a menores de edad son delitos graves que deben ser denunciados de inmediato. No se debe minimizar ningún acto de este tipo por parte de los adultos que rodean a los niños, incluyendo padres de familia y maestros. Esta es la firme declaración del licenciado Gustavo Hernández, procurador del menor del DIF Municipal de Misantla, quien enfatiza la responsabilidad de los adultos en proteger a los más vulnerables.

Los padres, maestros y cualquier adulto cercano a un menor tienen la vital responsabilidad de apoyar y acompañar a las víctimas a las instancias pertinentes, garantizando que estos delitos no queden impunes. “La educación sobre el respeto y la protección de los derechos de los menores es fundamental. Necesitamos fomentar un entorno seguro y de confianza donde los niños se sientan libres de hablar”, expresó Hernández.

El DIF Municipal ofrece apoyo legal y psicológico a las víctimas, además de estar autorizados para implementar medidas de protección cuando el menor es víctima de alguien en su entorno familiar o escolar. “Estamos aquí para ayudar. Si un niño ha sido víctima de acoso o abuso, no está solo. Nuestra institución proporciona el respaldo necesario para que reciba la atención adecuada”, agregó el procurador.

Para prevenir estos delitos, es esencial que las familias mantengan una comunicación abierta y honesta. Hernández subraya la importancia de que los padres estén atentos a las señales de alerta en sus hijos. “El diálogo es clave. Los niños deben sentirse seguros de hablar sobre cualquier situación que les incomode”, afirmó.

Los maestros, quienes frecuentemente son testigos de la situación de sus alumnos, también tienen un papel crucial en la detección y denuncia de estos delitos. Hernández advirtió que aquellos educadores que ignoren estas situaciones podrían enfrentarse a sanciones por no priorizar el interés del menor, que en este caso es su integridad física y emocional. “Es imperativo que los maestros actúen en beneficio de sus alumnos. La educación no solo se trata de enseñar materias, sino también de cuidar el bienestar de cada niño”, concluyó.

El procurador del menor hizo un llamado a la comunidad para que esté atenta y dispuesta a denunciar cualquier sospecha de acoso o abuso. La colaboración de todos es esencial para erradicar estas prácticas y garantizar un entorno seguro para los menores. La lucha contra el abuso sexual infantil comienza con la voluntad de hablar, escuchar y actuar.