Diputados aprueban prohibición total de vapeadores y cigarrillos electrónicos en México
Nueva Ley General de Salud endurece sanciones y cierra el paso al comercio de dispositivos electrónicos para fumar.
México, a 9 de diciembre de 2025.- La Cámara de Diputados avaló en lo general la iniciativa presidencial que prohíbe la producción, venta, distribución, publicidad y uso de cigarrillos electrónicos, vapeadores y dispositivos similares. La reforma contempla penas de 1 a 8 años de prisión, multas económicas de hasta 225 mil pesos y la cancelación inmediata de permisos sanitarios previos, con el objetivo de frenar riesgos a la salud y cerrar vacíos legales que permitían la operación del mercado.
Un cambio legislativo de gran alcance
La tarde del martes 9 de diciembre de 2025 marcó un punto de quiebre en la regulación del consumo de productos alternativos al tabaco en México. Con mayoría de votos, la Cámara de Diputados aprobó en lo general la reforma a la Ley General de Salud, impulsada por el Ejecutivo federal, con la cual se establece la prohibición total de cigarrillos electrónicos, vapeadores y otros dispositivos análogos.
La iniciativa fue presentada el 26 de septiembre de este mismo año y, desde entonces, había generado un intenso debate público por su impacto en consumidores, comerciantes y en la industria emergente de los vapeadores.
Objetivos centrales: salud pública y control total
La reforma plantea como eje principal la protección del derecho humano a la salud, especialmente ante el crecimiento del consumo de vapeadores entre jóvenes y adolescentes.
Para ello, se modifican los artículos 4 y 5 constitucionales, reforzando las atribuciones del Estado para regular —y en este caso prohibir— cualquier actividad relacionada con estos productos.
Entre los propósitos clave se encuentran:
Reducir enfermedades respiratorias, cardiovasculares y otras afecciones asociadas al uso de vapeadores.
Cerrar lagunas y vacíos legales que permitían el comercio informal o semiregulado de dispositivos.
Impedir la publicidad encubierta en redes sociales y medios digitales que impactaba principalmente en menores de edad.
Establecer un marco normativo estricto, con vigilancia sanitaria y responsabilidades puntuales.
La prohibición: un cerco total al mercado de vapeo
La norma aprobada prohíbe absolutamente todas las etapas vinculadas a cigarrillos electrónicos y vapeadores:
Obtención y preparación
Producción y fabricación
Envasado, transporte y almacenamiento
Importación y exportación
Comercio, distribución, venta y suministro
Publicidad impresa, digital, televisiva o radiofónica
Cualquier tipo de propaganda para promover su consumo
Con este cerco legal, México se coloca entre los países con la política más restrictiva del mundo respecto al vapeo.
Sanciones: multas y prisión para quienes sigan operando
La legislatura estableció sanciones severas para quienes lucren o comercien con estos dispositivos:
De 1 a 8 años de prisión
Multas de entre 11 mil y 225 mil pesos
El endurecimiento se justifica, de acuerdo con el dictamen, por la necesidad de frenar un mercado en expansión que, según organismos de salud, ha crecido de forma acelerada sin controles sanitarios reales.
Impacto inmediato: distribuidores deberán parar operaciones
Uno de los puntos más relevantes de la aprobación es la cancelación automática de todas las autorizaciones sanitarias otorgadas con anterioridad.
La Cofepris será la encargada de notificar a empresas y particulares para que suspendan, de inmediato, cualquier actividad vinculada con los dispositivos prohibidos.
Esto incluye:
Tiendas físicas de vapeadores
Distribuidores mayoristas
Comercios digitales
Influencers o promotores
Importadores y operadores logísticos
El dictamen subraya que no habrá periodo de gracia: la cancelación de permisos será inmediata.
Un fenómeno social en debate
La aprobación revive la discusión sobre el consumo de vapeadores en México, un tema que en los últimos años ha generado posturas encontradas: desde quienes consideran que estos dispositivos ayudan a dejar el cigarro tradicional, hasta quienes alertan sobre los riesgos respiratorios asociados al uso prolongado, especialmente entre adolescentes.
Numerosos estudios citados en el dictamen remarcan que el mercado de vapeo ha crecido de manera exponencial, aprovechando vacíos normativos y estrategias de marketing agresivo.




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