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La CNTE desata jornada de protesta: enfrentamientos, bloqueos y paro nacional de 48 horas paralizan la capital

Ciudad de México, a 13 de noviembre de 2025.- Una nueva jornada de movilización magisterial sacudió este miércoles el centro histórico de la Ciudad de México. Integrantes de la CNTE realizaron un paro nacional de 48 horas, enfrentándose con policías en la calle Moneda y desplazándose hacia el Congreso de la Unión, donde mantienen un plantón. Entre sus demandas destacan la eliminación de las reformas educativas y del ISSSTE, mejores condiciones laborales y la reactivación de las mesas de negociación.

I. Tensión en el Zócalo capitalino

Desde tempranas horas, contingentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) se concentraron en la plancha del Zócalo capitalino para manifestarse contra las políticas educativas y laborales del gobierno federal.

El punto más álgido ocurrió cuando los manifestantes intentaron ingresar por la calle de Moneda, bloqueada por vallas metálicas. En un intento por derribarlas, se registraron empujones y forcejeos con los elementos de seguridad. Ante el riesgo de confrontación, la policía capitalina implementó la técnica de encapsulamiento para contener al grupo, lo que desató la molestia de los docentes, quienes respondieron con gritos y empujones.

El ambiente, cargado de tensión, obligó al cierre preventivo de las estaciones Zócalo/Tenochtitlan, Allende y Pino Suárez del Metro, mientras el Sistema de Transporte Colectivo exhortó a la población a utilizar alternativas como San Juan de Letrán, Bellas Artes y San Antonio Abad.

II. Rumbo al Congreso: la movilización se extiende

Tras no lograr su ingreso hacia Palacio Nacional, los docentes reorganizaron su estrategia y emprendieron una marcha rumbo al Congreso de la Unión, donde otros contingentes de la CNTE ya habían comenzado la instalación de un campamento permanente.

Las autoridades capitalinas prevén cortes a la circulación en las inmediaciones del recinto legislativo, donde se espera la llegada de miles de maestros provenientes de diversos estados del país. De acuerdo con sus dirigentes, la jornada forma parte del paro nacional de 48 horas, convocado desde el primer minuto del 13 de noviembre hasta el final del día 14.

III. Demandas y contexto del paro nacional

El movimiento magisterial busca abrogar las reformas educativas aprobadas durante los sexenios de Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador, a las que acusan de vulnerar la autonomía docente y los derechos laborales del magisterio.

Entre los puntos centrales de su pliego petitorio destacan:
Reactivar las mesas de diálogo estatales y nacionales, suspendidas por falta de acuerdos.
Resolver los casos de basificación pendiente y aumento salarial.
Revisar las condiciones laborales en zonas rurales.
Derogar la Ley del ISSSTE de 2007, que, aseguran, perjudica las jubilaciones del magisterio.
Reducir la edad de retiro para los trabajadores de la educación.

La CNTE también convocó a acciones simultáneas en distintos puntos del país, incluyendo la liberación de casetas —particularmente en la autopista México-Cuernavaca—, además de volanteos, campañas informativas en redes sociales y actividades de difusión en escuelas.

IV. Lectura interpretativa: la CNTE y su pulso con el poder

La nueva movilización de la CNTE no es un hecho aislado, sino parte de un ciclo de confrontación histórica entre el magisterio disidente y el Estado mexicano. Aunque la administración actual prometió diálogo y respeto a la autonomía sindical, el descontento docente se mantiene.

Los reclamos evidencian un malestar estructural: la persistencia de rezagos en las comunidades educativas rurales, la precariedad en las condiciones de trabajo y la percepción de que las reformas educativas priorizan la evaluación sobre la formación pedagógica.

En este contexto, la protesta se convierte no solo en un acto político, sino también simbólico: una defensa de la dignidad docente frente a las políticas gubernamentales que consideran “punitivas” o “administrativas”.

La CNTE ha anunciado que las movilizaciones continuarán hasta el 14 de noviembre, con presencia constante en el Zócalo capitalino y el Congreso de la Unión. Se espera que durante estos días se desarrollen actos culturales y asambleas informativas para mantener activa la protesta.

Las autoridades de la Ciudad de México recomiendan a la ciudadanía evitar la zona centro y el oriente de la capital, así como mantenerse informada a través de los canales oficiales sobre los cortes viales y cierres del transporte público.

Mientras tanto, el país observa nuevamente cómo la CNTE —una de las fuerzas sindicales más persistentes y combativas— vuelve a poner en jaque la movilidad y la agenda política nacional bajo una consigna que sintetiza su postura: “Educación pública sí, reformas punitivas no.”

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