Israel desmantela una red terrorista de Hamás que planeaba ataques armados en Belén
Las FDI, el Shin Bet y la Policía de Israel detienen a más de 50 integrantes del grupo islamista
Israel, a 13 de noviembre de 2025.- Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), en coordinación con el Servicio de Seguridad Shin Bet y la Policía Nacional, realizaron una serie de operaciones conjuntas en el área de Belén, donde desmantelaron una red terrorista de Hamás que se encontraba en una fase avanzada de preparación para perpetrar ataques con armas de fuego y explosivos contra civiles y fuerzas de seguridad israelíes. Más de 50 sospechosos fueron detenidos y puestos a disposición de las autoridades de inteligencia.
Operativo de inteligencia y precisión militar
El ejército israelí informó que las operaciones se desarrollaron en un marco de inteligencia coordinada entre la Brigada Etzion de la reserva de las FDI, la Unidad Duvdevan y varios equipos contraterroristas especializados. En total, se realizaron más de 15 intervenciones, algunas de ellas de carácter encubierto y otras a plena luz del día.
Durante los registros, las fuerzas confiscaron armas automáticas, municiones y explosivos, además de material logístico utilizado por las células terroristas para coordinar los ataques.
Entre las armas decomisadas se encontraba un fusil de asalto M16, utilizado frecuentemente por las milicias de Hamás en enfrentamientos con las fuerzas israelíes.
“El desmantelamiento de esta infraestructura evitó importantes ataques terroristas que podrían haber causado graves pérdidas de vidas entre civiles y soldados israelíes”, señaló el comunicado oficial de las FDI.
Células en fase avanzada de ataque
De acuerdo con las conclusiones preliminares del Shin Bet, una de las células desarticuladas se encontraba en una etapa avanzada de planificación, con todos los preparativos listos para ejecutar atentados en un plazo inmediato.
Los operativos de alto rango dentro de la red habían reclutado nuevos miembros, organizado el suministro de armamento y diseñado rutas de escape posteriores a los ataques.
El grupo pretendía atacar simultáneamente objetivos civiles y militares, siguiendo un patrón de acción coordinada que buscaba desestabilizar la seguridad en el área de Judea y Samaria.
Las autoridades israelíes subrayaron que este tipo de células actúan de manera descentralizada, lo que hace más compleja su detección, y destacaron la importancia de la cooperación entre fuerzas regulares y unidades de inteligencia.
Impacto estratégico y respuesta del Estado israelí
Este desmantelamiento representa uno de los golpes más significativos contra Hamás en el área de Belén en los últimos meses, dentro de una estrategia de contención que busca prevenir ataques en territorio israelí y reducir la capacidad operativa de las facciones armadas palestinas.
El Shin Bet advirtió que, pese al éxito del operativo, Hamás continúa intentando reorganizar sus estructuras clandestinas en varias zonas de Cisjordania.
Por ello, las autoridades israelíes mantienen un estado de alerta reforzado y continúan con los patrullajes preventivos y operativos de inteligencia.
“Las FDI, el Servicio de Seguridad Shin Bet y la Policía de Israel continuarán operando para frustrar cualquier intento de Hamás de planear o ejecutar actividades terroristas contra el Estado de Israel y su población civil”, añadieron las autoridades en su declaración conjunta.
El operativo en Belén se inscribe en un contexto de tensión creciente entre Israel y las facciones palestinas que operan en Judea y Samaria, zonas donde Hamás y la Yihad Islámica mantienen células activas pese a los constantes operativos militares.
En los últimos meses, las FDI han intensificado las operaciones preventivas en respuesta a una escalada de ataques y emboscadas armadas que han dejado víctimas tanto civiles como militares.
El éxito del operativo no solo representa un alivio inmediato para las fuerzas de seguridad, sino que también envía un mensaje político y estratégico sobre la determinación de Israel de mantener su seguridad interna mediante acciones de inteligencia proactiva.
Desde un punto de vista interpretativo, esta operación refleja la evolución de la guerra asimétrica en la región: mientras Hamás intenta expandir su presencia en Cisjordania, Israel refuerza su red de cooperación entre agencias para anticipar amenazas antes de que se materialicen.
Con este operativo, Israel reafirma su política de seguridad preventiva, combinando inteligencia militar, tecnología de rastreo y despliegues tácticos de precisión. Mientras tanto, la comunidad internacional observa con atención el desarrollo de la situación en la región, en la que la estabilidad sigue dependiendo de la capacidad de anticipación frente a las amenazas terroristas.




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