Brasil sacudido: condenan a militares por planear el asesinato de Lula da Silva
El caso revela la profundidad del complot golpista vinculado a Jair Bolsonaro
Brasil, a 18 de noviembre de 2025.- La Corte Suprema de Brasil condenó este martes 18 de noviembre de 2025 a tres altos mandos militares y un policÃa por planificar el asesinato del presidente Luiz Inácio Lula da Silva en 2022, en el marco del fallido intento de golpe de Estado impulsado por el expresidente Jair Bolsonaro—el primer mandatario brasileño en ser sentenciado a prisión. El juicio marca un precedente inédito al castigar por primera vez a militares de alto rango involucrados en un complot para eliminar a autoridades del Estado.
El complot: un plan para “neutralizar” a Lula y a miembros de la Corte
De acuerdo con los magistrados, los acusados integraron una estructura clandestina destinada a “neutralizar autoridades públicas brasileñas”, entre ellas el entonces presidente electo Luiz Inácio Lula da Silva y el juez del Supremo Tribunal Federal, Alexandre de Moraes.
El plan formaba parte de un entramado mayor: el intento de golpe de Estado liderado por Jair Bolsonaro tras perder las elecciones de 2022. Las investigaciones revelaron que el objetivo no era solo desconocer los resultados electorales, sino eliminar fÃsicamente a figuras clave para impedir la transición democrática.
Fuentes judiciales revelaron que el complot incluso consideraba métodos de envenenamiento contra Lula, según pesquisas documentadas desde 2024.
El juicio: una sesión histórica en la Corte Suprema
La Primera Sala de la Corte Suprema concluyó el proceso declarando culpables a nueve de los diez acusados, imponiendo penas que oscilan entre 1 y 24 años de prisión. Entre ellos se encuentran tres altos mandos militares y un policÃa, marcando un hecho sin precedentes en el paÃs.
Uno de los acusados, el general Estevam Gaspar de Oliveira, fue absuelto por unanimidad, luego de que la FiscalÃa no encontrara pruebas suficientes para vincularlo al plan.
El juicio también se enmarca en las acusaciones contra Bolsonaro, quien fue sentenciado previamente a 27 años de cárcel por intento de golpe de Estado, abolición del Estado de derecho y liderazgo de organización criminal.
Por primera vez en la historia de Brasil, un expresidente y militares de alto rango enfrentan condenas simultáneas por atentar contra la democracia.
La sombra del golpismo: Bolsonaro y su red
Los hechos juzgados están estrechamente ligados con los operativos de septiembre y octubre de 2024, cuando fueron detenidos miembros de una unidad de élite del Ejército acusados de planear la muerte de Lula como parte de un complot para mantener a Bolsonaro en el poder.
Según reportes del New York Times, entre los detenidos habÃa incluso un exayudante cercano al expresidente. La operación clandestina buscaba eliminar a Lula antes o después de su toma de posesión, y garantizar que el expresidente continuara a la cabeza del Ejecutivo pese a su derrota electoral.
La Corte Suprema ha señalado que el plan representó una amenaza “real, concreta y organizada” contra las instituciones democráticas, con ramificaciones que alcanzan a sectores militares y policiales.
Antes y un después en la justicia brasileña
La sentencia emitida este 18 de noviembre de 2025 marca un punto de inflexión en la relación entre las Fuerzas Armadas brasileñas y el sistema democrático.
Este caso expone un fenómeno que América Latina ha enfrentado en diversas épocas: la tentación autoritaria que emerge cuando sectores del poder armado buscan intervenir en la conducción polÃtica del paÃs. Lo que distingue a Brasil en esta coyuntura es la firmeza judicial con la que se ha respondido, en un momento donde la polarización y los discursos de odio continúan erosionando la confianza pública.
La condena también redefine el papel del Poder Judicial como garante último de la estabilidad democrática, mostrando que ninguna figura, por influyente que sea, queda exenta de rendir cuentas.
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