Greta Thunberg y otros 11 activistas detenidos tras desafiar el bloqueo naval israelí rumbo a Gaza

Israel, a 9 de junio del 2025.- La tensión volvió a escalar en el Mediterráneo cuando la Armada israelí interceptó el barco activista Madleen, que intentaba romper el férreo bloqueo marítimo impuesto sobre la Franja de Gaza. A bordo se encontraba la reconocida activista climática sueca Greta Thunberg, el brasileño Thiago Ávila, la eurodiputada franco-palestina Rima Hassan y otros nueve activistas, quienes fueron detenidos la madrugada del lunes por fuerzas especiales de Israel.

La embarcación, bautizada por medios locales como el “Yate Selfie”, fue escoltada hasta el puerto de Ashdod, donde las autoridades israelíes confirmaron su arribo y comenzaron los procedimientos de deportación para los 12 tripulantes. El operativo fue ejecutado por la unidad de comando naval Shayetet 13 y la unidad portuaria Snapir, tras varias advertencias ignoradas por parte de los activistas desde su salida de Sicilia.

Antes de su desembarco, los detenidos fueron obligados a ver un video de 43 minutos, desgarrador y sin censura, que muestra las masacres cometidas por el grupo terrorista Hamás el pasado 7 de octubre. Según el ministro de Defensa, Israel Katz, la intención fue confrontar a los activistas con el contexto del conflicto que aseguran desconocer. Las imágenes, filmadas por las propias cámaras corporales de los agresores, muestran escenas de extrema violencia, cuerpos mutilados y víctimas civiles asesinadas.

La travesía fue organizada por la Coalición de la Flotilla de la Libertad, una iniciativa pro-palestina que, desde hace años, ha intentado burlar el bloqueo impuesto a Gaza. En esta ocasión, el Madleen llevaba una carga simbólica de ayuda humanitaria, según sus organizadores, con la intención de visibilizar lo que califican como “una crisis humanitaria sin precedentes” provocada por la guerra entre Israel y Hamás, que ya supera los 20 meses.

Sin embargo, tanto el Ministerio de Asuntos Exteriores israelí como voceros militares recalcaron que la zona marítima frente a Gaza está cerrada al tránsito no autorizado y que la ayuda puede canalizarse legalmente a través del puerto de Ashdod, bajo supervisión de las autoridades israelíes.

La última posición registrada del Madleen fue cerca de Puerto Said, Egipto, a unos 55 kilómetros náuticos de las aguas bajo control israelí. A las 3:00 a.m., la embarcación fue interceptada tras ignorar una última advertencia por altavoz, difundida posteriormente en video, en la que un soldado israelí advertía claramente que cualquier intento de llegar a Gaza sería considerado una violación del bloqueo.

Pese a las advertencias, el barco continuó su curso y fue abordado en plena oscuridad por las fuerzas israelíes. El operativo, que fue descrito por las autoridades como “rápido y sin incidentes”, finalizó con el remolque del buque hacia Ashdod.

Las autoridades israelíes informaron que los activistas, entre ellos figuras públicas internacionales, serán entregados a la policía migratoria y posteriormente deportados a sus países de origen. Ninguno de los detenidos resultó herido y, tras pasar por exámenes médicos, se encuentran en buen estado de salud.

La incursión del Madleen reaviva el debate internacional sobre la legitimidad del bloqueo a Gaza, el uso de la ayuda humanitaria como instrumento de presión política y la creciente implicación de activistas globales en un conflicto de alta complejidad. Mientras tanto, en Israel, la operación fue celebrada como una victoria diplomática y de seguridad ante lo que consideran una provocación bajo el manto del activismo.