Noticias

¿Triunfo cantado o estrategia mediática? Morena presume ventaja electoral en Veracruz, pero crecen las dudas sobre equidad y democracia

Veracruz,
a 23 de mayo del 2025.- A solo unos días de la jornada electoral del 2 de junio, el partido Morena ha lanzado un mensaje contundente: ya se sienten ganadores en los principales municipios de Veracruz. Así lo dejó entrever Luisa María Alcalde, dirigente nacional del partido guinda, al revelar cifras y encuestas que favorecen a sus candidatos en plazas clave como Veracruz puerto, Xalapa, Poza Rica, Córdoba y Coatzacoalcos.

Con gráficos en mano y un discurso triunfalista, Alcalde Luján aseguró que la 4T lleva la delantera en los municipios más poblados de la entidad, presumiendo porcentajes abrumadores que parecen más propios de una elección ya consumada que de una competencia abierta.

“Llevamos ventaja en prácticamente todos los municipios importantes. La ciudadanía está con nosotros”, declaró, como si el veredicto popular ya estuviera escrito antes de que se abran las urnas.

En el Puerto de Veracruz, según los números de Morena, su candidata Rosa María Hernández Espejo tiene un 49% de las preferencias, contra 29% del PAN. En Xalapa, Daniela Griego arrasaría con un 47%, dejando muy atrás al PRI con apenas 21%. En Córdoba, el morenista Manuel Alonso Cerezo obtendría 53%, mientras Movimiento Ciudadano apenas alcanza un 16%.

Pero mientras Morena saca pecho con estas cifras, las voces críticas alertan sobre una peligrosa arrogancia electoral que podría debilitar el principio de equidad y desincentivar la participación ciudadana.

La publicación de estos datos, a menos de diez días de los comicios, parece más una estrategia para generar percepción de victoria inevitable que una rendición de cuentas objetiva sobre el proceso democrático. Esta narrativa –que se repite elección tras elección– termina por desincentivar a los votantes indecisos y lanza un mensaje peligroso: que todo está decidido, incluso antes del voto.

Organismos ciudadanos ya han levantado la voz por el uso de encuestas sin metodología clara, que se convierten en herramientas propagandísticas disfrazadas de información técnica.

“No hay elección sin incertidumbre. Cuando un partido se proclama ganador antes de tiempo, socava la legitimidad del proceso y reduce el terreno del debate público”, señalaron activistas del Observatorio Ciudadano Electoral de Veracruz.

En su discurso, Luisa María Alcalde también retomó las declaraciones de la gobernadora Rocío Nahle, quien afirmó que “hay condiciones para que la gente salga a votar sin temor”, gracias al reforzamiento de la seguridad en todo el estado.

Pero el optimismo choca con la realidad: Veracruz sigue siendo uno de los estados con mayores reportes de violencia política y amenazas a candidatos, especialmente en zonas como la sierra de Zongolica y municipios del sur.

“Decir que hay paz total en Veracruz es un insulto para quienes viven entre patrullas, extorsiones y miedo cotidiano. Que no nos vendan espejitos”, dijo un académico de la Universidad Veracruzana, que pidió el anonimato por seguridad.

Aunque Morena busque instalar la idea de una victoria inevitable, el futuro político de Veracruz aún está en manos de millones de ciudadanos. Y su voto vale más que cualquier gráfica proyectada desde un escritorio partidista.

El reto no es solo ganar, sino respetar las reglas democráticas, garantizar una contienda justa y permitir que el pueblo hable en las urnas sin presiones ni verdades anticipadas. Porque la democracia no se presume: se construye, se cuida y se respeta.

No hay comentarios