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Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción invita a las familias a unirse en oración y devoción durante todo el mes.

Por Arquímedes González.
Misantla, Ver., a 4 de mayo del 2025.- Como cada año, durante el mes de mayo, la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción de Misantla celebra el tradicional “Mes de María”, una actividad que convoca a niños, jóvenes y adultos a participar en el rezo del Santo Rosario y en el ofrecimiento de flores a la Virgen María, Madre del Cielo, en un acto lleno de fe, esperanza y unión comunitaria.

Bajo el lema “Mes de mayo, mes de María”, esta iniciativa forma parte de una antigua tradición católica que honra a la Virgen como símbolo de pureza, maternidad y guía espiritual, durante todo el mes, los fieles se reúnen en el templo parroquial para encomendar sus plegarias, agradecer bendiciones y pedir la intercesión de María Santísima por las necesidades del pueblo y de cada familia.

Las actividades se realizan de lunes a sábado a las 5:00 de la tarde, mientras que los domingos la cita es a las 4:00 de la tarde, en el templo principal de la ciudad, el evento ha sido organizado por el equipo pastoral de la parroquia, con el apoyo de grupos de catequesis, movimientos laicales y familias voluntarias que preparan cada día las ofrendas florales y dinámicas espirituales.

El párroco local expresó que esta celebración es un momento propicio para fortalecer la vida espiritual de la comunidad y fomentar los valores familiares: “mayo es un mes muy especial para nosotros porque recordamos a María como nuestra Madre espiritual, invito a todos, especialmente a los niños y jóvenes, a acercarse a ella, a conocer su vida y a imitar sus virtudes, María nos enseña a confiar en Dios, aún en los momentos más difíciles”, comentó durante la primera jornada de oración.

Vecinos de distintas colonias han expresado su alegría y agradecimiento por mantener viva esta tradición que, más allá del aspecto religioso, fortalece los lazos sociales y el sentido de pertenencia: “Es muy bonito ver cómo las familias vienen juntas, cómo los abuelitos traen a sus nietos, cómo se crea un ambiente de paz. Son momentos que nos llenan el corazón”, expresó una feligresa del centro.

El equipo organizador extendió la invitación a toda la población misanteca para sumarse a las actividades en cualquier momento del mes, sin importar si participan de forma regular en la vida parroquial: “Este es un espacio abierto a todos, es una oportunidad para reconectar con la fe, con la comunidad y con nosotros mismos”, subrayaron.

La Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción recuerda que las puertas del templo están abiertas y que cada flor entregada a María es un símbolo de amor, esperanza y entrega que contribuye a construir una comunidad más solidaria y fraterna.

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