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El frijol, cultivo clave en Nayarit, se beneficia con lluvias atípicas

Nayarit,
a 10 de enero del 2025.- El frijol es uno de los cultivos más relevantes para el estado de Nayarit, con una extensión aproximada de 50 mil hectáreas dedicadas anualmente a su siembra, según informó Armando Zepeda Carrillo, encargado de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural en la entidad. Sin embargo, su producción está altamente ligada a la disponibilidad de humedad en el suelo, un factor que se ha visto afectado en los últimos años por la sequía.

Ante este panorama, las lluvias atípicas que han caído recientemente sobre el estado representan una esperanza para los agricultores. “El frijol es el cultivo más importante, con mayor número de productores y de mayor superficie en el estado. Este año, gracias al programa de precio de garantía, por primera vez se le otorga un precio piso de 27 pesos por kilo, lo que ha generado grandes expectativas entre los productores”, declaró Zepeda Carrillo.

El titular destacó que los municipios frijoleros del norte del estado han enfrentado en los últimos años una marcada escasez de lluvias, afectando la humedad residual necesaria para el cultivo. Sin embargo, las precipitaciones recientes podrían marcar un punto de inflexión en la temporada agrícola.

“Estas lluvias que hemos tenido ayer y hoy están beneficiando enormemente al campo. El frijol, en este momento, se encuentra en etapa de desarrollo vegetativo, por lo que la humedad es clave para garantizar su crecimiento adecuado y, en consecuencia, una cosecha exitosa”, añadió.

El programa de precio de garantía implementado por Alimentación para el Bienestar establece un precio mínimo de 27 pesos por kilo de frijol, marcando un hito histórico en el apoyo a los productores. Este incentivo económico, sumado a las recientes lluvias, ha generado un clima de optimismo entre los agricultores, quienes esperan que esta combinación de factores pueda mitigar los efectos de las sequías pasadas y asegurar una temporada productiva.

El frijol no solo es un cultivo estratégico por su valor económico, sino también por su impacto en la seguridad alimentaria de la región. La posibilidad de contar con mejores condiciones climáticas y un precio justo da a los productores la oportunidad de fortalecer su actividad y contribuir al desarrollo rural del estado.

Las próximas semanas serán cruciales para determinar el impacto de estas lluvias en las cosechas, mientras los agricultores y autoridades permanecen atentos a las condiciones climáticas y al avance del cultivo.

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