Revolución alimentaria escolar: Cambios en el recreo para un futuro saludable
México, a 19 de noviembre del 2024.- La alimentación de los jóvenes se ha convertido en una prioridad nacional, especialmente con la llegada de Claudia Sheinbaum a la presidencia de México. Con su liderazgo, el bienestar estudiantil ocupa un lugar central en la agenda pública. A partir del 29 de marzo de 2025, las cooperativas escolares sufrirán transformaciones radicales, eliminando los alimentos ultraprocesados y promoviendo opciones más saludables.
El titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Mario Delgado, anunció un programa de ocho acciones para transformar los hábitos alimenticios en las escuelas:
- Prohibición de alimentos ultraprocesados.
- Promoción del consumo de agua natural.
- Capacitación a personal escolar.
- Campañas educativas para familias y docentes.
- Refuerzo del enfoque de vida saludable en la Nueva Escuela Mexicana.
- Creación de cursos para profesores.
- Incentivo a la práctica deportiva.
- Implementación de un sistema de seguimiento.
Además, los cambios incluyen lineamientos claros publicados en el Diario Oficial de la Federación (DOF), donde se establece un periodo de adaptación de 180 días.
La lista de productos prohibidos es extensa y abarca desde quesadillas y tacos hasta botanas, chocolates, jugos y bebidas azucaradas. Estos alimentos serán reemplazados por opciones frescas, locales y nutritivas. Por ejemplo, se priorizarán frutas de temporada, cereales integrales y proteínas bajas en grasa como pollo y pescado.
Actualmente, el 98% de las escuelas vende comida chatarra, mientras que el 95% ofrece bebidas azucaradas. Estas cifras revelan la magnitud del desafío para lograr un cambio cultural en los entornos escolares.
Las sanciones por incumplimiento no serán ligeras: multas que oscilan entre 10,900 y 109,000 pesos, con posibilidad de duplicarse en casos reincidentes.
El gobierno busca no solo mejorar la salud de los estudiantes, sino también inculcar en ellos hábitos que perduren toda la vida. Padres, maestros y comunidades tienen ahora la responsabilidad de unirse a esta transformación para garantizar un futuro más saludable y activo para las nuevas generaciones.
La revolución alimentaria escolar ya está en marcha. ¿Estamos listos para el cambio?
No hay comentarios