¿Es Obligatorio el Uso de Uniformes Escolares en México?

México, a 13 de julio del 2024.- A poco más de un mes del inicio del ciclo escolar 2024-2025, y como cada año, el regreso a clases implica gastos en inscripciones, útiles, materiales educativos y uniformes. Pero, ¿qué sucede si los alumnos no llevan uniforme a la escuela? Aquí te explicamos la situación en México.

Primero, es fundamental recordar que la Constitución mexicana garantiza el derecho a la educación para todas las personas. El artículo 3 de la Constitución establece la obligatoriedad de los niveles de preescolar, primaria, secundaria y media superior. A nivel federal, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha dejado claro que el uso de uniforme no es obligatorio en México.

La Secretaría de Educación Pública (SEP) recomienda el uso de uniformes porque se considera una medida de seguridad tanto para las escuelas como para los alumnos. Sin embargo, esta recomendación no se traduce en una obligación legal que permita negar el acceso a la educación a los estudiantes que no los usen.

El artículo 146 de la Ley General de Educación especifica que "la adquisición de uniformes y materiales, así como de actividades extraescolares, no podrá condicionar la prestación de este servicio público". Esto significa que exigir el uso de uniformes como condición para acceder a la educación constituye una infracción.

Aunque muchos estudiantes aún disfrutan de las vacaciones de verano, el calendario oficial de la SEP marca el regreso a clases para el lunes 26 de agosto. El ciclo escolar 2024-2025 incluirá dos periodos intermedios de vacaciones, nueve días de descanso oficiales y aproximadamente diez viernes sin clases debido a juntas de consejo técnico o registros de calificaciones.

En resumen, aunque el uso de uniformes escolares es una práctica recomendada por sus beneficios en términos de seguridad y disciplina, en México no es un requisito legal indispensable para acceder a la educación. Las escuelas no pueden condicionar la prestación del servicio educativo a la adquisición de uniformes, garantizando así el derecho a la educación de todos los estudiantes, sin importar su vestimenta.