Expresidente de Honduras Condenado por Narcotráfico en Nueva York

Estados Unidos, a 26 de junio del 2024.- Juan Orlando Hernández, expresidente de Honduras (2014-2022), ha sido sentenciado a 45 años de prisión y cinco años de libertad condicional por delitos relacionados con narcotráfico y el uso de armas. El veredicto fue emitido por un tribunal en Nueva York, que lo encontró culpable de conspirar para importar cocaína y utilizar ametralladoras y dispositivos destructivos para facilitar el tráfico de drogas hacia Estados Unidos.

El juez Kevin Castel también impuso una multa de 8 millones de dólares a Hernández y solicitó a su abogado que presente un plan de pago en las próximas dos semanas. El fallo marca un hito significativo, pues evitó la cadena perpetua que había solicitado la Fiscalía.

Durante la lectura de la sentencia, el juez Castel criticó duramente a Hernández, describiéndolo como un "hombre de dos caras" que mientras se proclamaba en contra del narcotráfico, facilitaba activamente la exportación de toneladas de cocaína. La sentencia subraya la gravedad de los delitos cometidos, valorando las drogas traficadas en unos 10 millones de dólares.

Hernández, de 55 años, actualmente se encuentra detenido en la cárcel de Brooklyn, donde esperará la decisión del juez sobre su traslado a otra instalación penitenciaria en los próximos 120 días.

Este caso lo convierte en el mandatario latinoamericano de más alto rango condenado por narcotráfico en Estados Unidos desde Manuel Antonio Noriega en 1992. El juicio, que duró más de dos semanas, estableció que Hernández había utilizado su posición política desde 2004 para apoyar organizaciones narcotraficantes en Honduras y México.

Hernández, visiblemente envejecido y apoyado en un bastón durante la lectura de la sentencia, mantuvo su compostura y solo interrumpió para confirmar la continuidad de su abogado durante el proceso de apelación, si se produce.

El impacto de esta sentencia envía un mensaje claro sobre la responsabilidad incluso para aquellos en posiciones de poder y destaca la colaboración internacional en la lucha contra el narcotráfico en América Latina.

Este caso sigue desarrollándose mientras Hernández enfrenta las consecuencias legales de sus acciones en un tribunal estadounidense.