Reliquias de la beata María Magdalena de la encarnación en Misantla

Misantla, Ver., a 15 de julio del 2018.- Las reliquias de la beata María Magdalena de la encarnación de orden de las adoratrices perpetuas del santísimo sacramento llegaran a este municipio de Misantla, donde la feligresía católica podrá asistir al convento San José de esta ciudad. 

La orden de las adoratrices perpetuas del santísimo sacramento está ya en preparativos para que la población pueda conocer y aumentar el amor en Jesús Eucaristía, a través de las reliquias de la beata María Magdalena de la Encarnación, las cuales estarán en el Monasterio de las Adoratrices Perpetuas del Santísimo Sacramento, ubicado en la calle Melchor Ocampo entre Alatriste y Bogalil Gil, en el corazón de esta ciudad. 

Las madres adoratrices como son conocidas en esta ciudad, exponen que los vestigios de la religiosa constan de un pequeño hueso de su cuerpo, brazo y pie, piezas que para los católicos es una forma de rendir honor y encomendarse a ella. Al mismo tiempo explican que María Magdalena de la Encarnación es la fundadora de la Orden Adoratrices Perpetuas del Santísimo Sacramento, ella (Beata Madre María Magdalena de la Encarnación) estando de novicia estaba haciendo aseo en el comedor, y en eso se le abre la pared y se le revela Jesús con muchos ángeles vestidos de blanco y rojo, y le dice: ´Yo te he elegido a ti para que seas instrumento y fundes una orden cuyo fin, vida y luz sea la Eucaristía 

A los 32 años fue superiora y a los 37 años se fue a fundar la orden a Roma, Italia. Y Dios a través de ella hizo muchos milagros. Y murió a los 54 años el 29 de noviembre de 1824, fue beatificada el 03 de mayo de 2008 por su milagro, a través de Dios, de reconstruir el cerebro a una persona que sufrió un accidente vehicular en Culiacán, Sinaloa. 

Así, las reliquias de la santa podrán ser visitadas del 16 de agosto al 31 de agosto, las hermanas religiosas apuntaron que la invitación se hace previo para que la feligresía pueda asistir y se dé un espacio para que tenga ese encuentro con el Señor, con la oración comunitaria se espera que pueda ser subida a los altares.