En Veracruz, la familia Yunes se disputaría la gobernatura

El senador José Francisco Yunes Zorrilla será el precandidato a gobernador por el PRI y Miguel Ángel Yunes, por el PAN -PRD

México, a 27 de diciembre del 2017.- El presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza, anunció que el senador José Francisco Yunes Zorrilla será el precandidato a gobernador de unidad en las elecciones de Veracruz, que se celebrarán en 2018.

En un comunicado de prensa informó que los dirigentes de los sectores y organizaciones del partido manifestaron a Yunes Zorrilla su respaldo y apoyo para la precandidatura.

El senador Héctor Yunes Landa, ex candidato a la gubernatura en el 2016, quien también se postuló en esta ocasión para repetir como abanderado, dio su respaldo al político originario de Perote, y además, se perfiló como coordinador de su campaña, candidato a una diputación federal plurinominal y coordinador de la bancada veracruzana.

El líder nacional priísta aseveró que José Yunes es un hombre joven, con una amplia preparación académica y una trayectoria política y partidista al servicio de los veracruzanos.

Destacó: “José Yunes Zorrilla es el indicado para dirigir el estado de Veracruz y llevarlo al siguiente nivel de desarrollo, para crear oportunidades de educación, salud y empleo para las mujeres, hombres y jóvenes de la entidad, y proporcionar bienestar y seguridad a la población”.

El texto del PRI destacó que el precandidato creció en el seno de una familia honesta y trabajadora, y que desde muy joven se caracterizó por su compromiso con el trabajo.

Yunes Zorrilla realizó sus estudios en escuelas públicas en la entidad y se tituló como licenciado en Administración por el ITAM. Además, cuenta con una maestría en Administración Pública por la Universidad de Columbia, en Estados Unidos.

Ha ocupado diversos cargos de elección popular, fue dos veces diputado federal, diputado local y Senador por su estado. Así como también, es reconocido por su labor como Presidente del PRI en Veracruz y la alcaldía de Perote.

Fuente: el debate