María Sheccid Cruz, campeona nacional, libra su pelea más dura: reunir recursos para representar a Misantla en Tlaxcala

La joven pugilista busca asistir al IV Torneo Nacional “Fuego en los Señoríos” sin respaldo institucional.

Por Arquímedes González.

Misantla, Ver., a 17 de noviembre de 2025.- Tras coronarse campeona nacional en el Torneo Puños Rosas 2025, María Sheccid Cruz enfrenta un nuevo desafío: financiar por cuenta propia su participación en el próximo torneo nacional en Apizaco, Tlaxcala. Sin apoyo municipal, la joven de 18 años acude al respaldo de la población para seguir creciendo en el boxeo.

Una campeona que no deja de pelear

María Sheccid Cruz tiene 18 años y una trayectoria deportiva que crece a pasos firmes. Su victoria en el Torneo Puños Rosas 2025 no solo le otorgó un título nacional, sino que dejó claro que Misantla cuenta con una pugilista de talla competitiva, disciplinada y dispuesta a llegar tan lejos como su esfuerzo se lo permita.

Con rapidez, su nombre comenzó a resonar en gimnasios, academias y espacios deportivos. Entrenadores, atletas y seguidores coinciden: Sheccid es una promesa con potencia técnica y emocional. Pero mientras sus puños conquistan reconocimientos, su camino enfrenta un golpe inesperado: la falta de apoyo institucional.

El desafío fuera del ring: reunir fondos para competir

El IV Torneo Nacional de Boxeo “Fuego en los Señoríos” es una vitrina deportiva importante a nivel nacional. Ahí se enfrentarán algunas de las mejores pugilistas amateur de México. Sheccid fue convocada por su desempeño, pero ahora la distancia entre Misantla y Tlaxcala no se mide en kilómetros, sino en pesos mexicanos.

Transporte, alimentación, inscripción, equipo y gastos básicos… la suma rebasa sus posibilidades económicas. Ante ello, decidió recurrir a quienes siempre apoyan a sus talentos: los ciudadanos.

En una publicación sincera en redes sociales, explicó su situación:

—“Estoy muy emocionada de poder participar; he tenido peleas con boxeadoras de diferentes ciudades y me ha ido muy bien, pero ahora necesito apoyo para poder asistir”.

El mensaje se volvió un llamado colectivo que muchos comenzaron a compartir.

Creatividad y esfuerzo: la ruta autofinanciada de Sheccid

Lejos de esperar soluciones externas, la joven boxeadora puso manos a la obra. Comenzó a organizar subastas, preparar postres y cocinar alimentos que ella misma ofrece para recaudar fondos. Cada actividad no solo aporta a su meta, sino que refleja una lección propia del deporte: la constancia también se entrena fuera del cuadrilátero.

Su comunidad ha respondido de forma positiva, aunque aún falta camino por recorrer. La escena es clara: mientras otros atletas viajan con delegaciones, ella avanza con lucha personal y con la solidaridad de quienes reconocen su talento.

Una promesa que inspira a Misantla

Más allá de sus medallas, Sheccid se ha convertido en un ejemplo para niñas y jóvenes que buscan abrirse paso en disciplinas donde la visibilidad es escasa. Su historia es inspiradora porque combina sacrificio, humildad y valentía: tres ingredientes que suelen forjar a los grandes atletas.

Que una deportista con título nacional carezca de apoyo oficial también abre una reflexión sobre el papel de los gobiernos locales en la promoción del deporte, especialmente en jóvenes con potencial competitivo.

Mientras tanto, Sheccid continúa entrenando diariamente con la misma convicción que llevó su nombre al podio nacional: poner en alto a Misantla.

Datos del evento y cómo apoyar

La pugilista está programada para competir en el IV Torneo Nacional de Boxeo “Fuego en los Señoríos”, a realizarse en Apizaco, Tlaxcala, en los próximos días. Su participación depende de los recursos que logre reunir a tiempo.

Quienes deseen apoyarla pueden comunicarse directamente al número: (235) 114 90 45

María Sheccid Cruz ya demostró su fuerza deportiva. Ahora, Misantla tiene frente a sí la oportunidad de ayudarla a ganar la pelea más decisiva: mantener vivo su sueño y llevar su talento hasta donde sus manos —y el respaldo ciudadano— la puedan llevar.