Impactante gesto político en Chaco: Milei recibe una estatuilla dorada con tobillera electrónica en alusión a Cristina Kirchner y lanza un mensaje desafiante: “Libertad o tobillera”
Argentina, a 11 de octubre de 2025.- En medio de cánticos, banderas celestes y euforia libertaria, el presidente Javier Milei protagonizó una escena que ya da la vuelta al país: durante su visita a Resistencia, recibió un inusual y provocador regalo —una estatuilla dorada de un taco femenino con una tobillera electrónica— en alusión directa a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, condenada por corrupción en la causa Vialidad.
El mandatario, que se encontraba acompañado por su hermana y secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, fue recibido por el gobernador Leandro Zdero y la vicegobernadora Silvana Schneider, en un recorrido político cargado de simbolismo y de apoyo popular. Sin embargo, el momento más comentado de la jornada se produjo cuando un militante libertario, identificado como Nazareno, le obsequió la polémica pieza que lleva grabadas las iniciales “CFK” y la marca “Gucci”, una ironía hacia los lujos que se le atribuyen a la exmandataria.
Según explicó el propio autor del regalo en un video viral, la escultura representa “el pie de la chorra, de la condenada”, haciendo referencia a la figura judicial de Fernández de Kirchner. “Es desde Villa Ángela, Chaco. Que se viralice y le llegue al Presidente”, pidió el simpatizante, enfundado en una camiseta del movimiento Las Fuerzas del Cielo, la agrupación libertaria que acompaña a Milei.
El presidente recibió la estatuilla durante su paso por el centro de la capital chaqueña, donde una multitud lo esperaba al grito de “¡Viva la libertad, carajo!”. Desde la parte trasera de una camioneta, Milei levantó con orgullo el singular obsequio en una mano y un peluche de león en la otra, en una escena que simbolizó el enfrentamiento entre “el pasado kirchnerista y el nuevo rumbo libertario”. Acto seguido, dejó caer la estatuilla al suelo del vehículo, como gesto de desafío y victoria, mientras los militantes coreaban su nombre.
Minutos después, el mandatario publicó en su cuenta de X (antes Twitter) un mensaje que rápidamente se volvió tendencia:
“La elección es clara: libertad o tobillera. ¡VLLC!”.
Su visita a Chaco no se limitó al espectáculo político. Milei ofreció un encendido discurso ante miles de simpatizantes, donde volvió a insistir en su narrativa de ruptura con el kirchnerismo. “Nos encontramos en una disyuntiva histórica: avanzar hacia la libertad o volver al pasado. No aflojen, esta vez el esfuerzo vale la pena”, expresó, acompañado por aplausos y cánticos.
El presidente también aprovechó el acto para respaldar a los candidatos locales de La Libertad Avanza, entre ellos Juan Cruz Godoy, Mercedes Goitía, Guillermo Agüero y la propia Silvana Schneider, quien buscará un escaño en el Senado. “Cuando Silvana esté en el Senado, va a rugir como un león porque defiende la libertad”, aseguró Milei, destacando la gestión del gobernador Zdero y su alineación con las políticas nacionales.
Durante el evento, no faltaron las tensiones. A pocas cuadras del mitin principal, un grupo de manifestantes kirchneristas intentó aproximarse para expresar su descontento, pero fueron contenidos por un cordón policial que evitó enfrentamientos.
El episodio del “taco dorado” ya genera intensas reacciones en redes y en el ámbito político. Para unos, se trata de una puesta en escena provocadora, coherente con el estilo disruptivo del presidente; para otros, una falta de respeto institucional.
Lo cierto es que, una vez más, Milei convirtió un gesto simbólico en un acto político de alto impacto, reafirmando su estrategia de comunicación basada en la confrontación y la provocación. Su frase “libertad o tobillera” no solo marcó tendencia digital, sino que se consolidó como el nuevo eslogan de batalla para su militancia.
En medio de aplausos, polarización y espectáculo político, la jornada en Chaco dejó un mensaje claro: el presidente no baja el tono de su discurso y sigue dispuesto a marcar distancia con el pasado kirchnerista, utilizando tanto la palabra como la imagen para encender la conversación nacional.
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